miércoles, 25 de diciembre de 2013

TE QUIERO

Por Diana Zepeda

Te quiero porque me quieres
te quiero por tus virtudes,
te quiero porque me quieres
te quiero nunca lo dudes.

Amo cuando ríes
te amo cuando lloras
amo cuando tienes prisa,
y te amo cuando demoras

Te amo aquí y en China
en andrajos o ropa fina,
en el fracaso y en la victoria
en álgebra como en historia.


miércoles, 23 de octubre de 2013

El hombre de piedra

Por Diana Zepeda

El hombre de piedra
un día despertará
cansado y viejo
en terrible soledad.

Aquellos que lo amaron
y sin pena despreció
se habrán agotado
de buscar su amor.

Morirá en el olvido
con el corazón seco,
antes de partir no habrán
bellos recuerdos que añorar.

Verá ante su mirada fría
la corta vida pasar
sabrá que vivió equivocado
sin rumbo, de aquí para allá.

Volando como el viento,
cerca y después tan lejos,
desvaneciéndose en un instante
como las olas en el mar.

Dios perdone su egoísmo
y su falta de humildad,
lo reciba en su seno
en su infinita bondad.

Pediré cada día
por su alma perdida
que rectifique su vida
y no tenga un triste final.

Soñaré que ha vuelto,
abrazaré su recuerdo
y lo amaré desde lejos,
aunque no vuelva más.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Dolor

Alfonsina Storni

Quisiera esta tarde divina de octubre 
pasear por la orilla lejana del mar; 
que la arena de oro, y las aguas verdes, 
y los cielos puros me vieran pasar. 

Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera, 
como una romana, para concordar 
con las grandes olas, y las rocas muertas 
y las anchas playas que ciñen el mar. 

Con el paso lento, y los ojos fríos 
y la boca muda, dejarme llevar; 
ver cómo se rompen las olas azules 
contra los granitos y no parpadear; 
ver cómo las aves rapaces se comen 
los peces pequeños y no despertar; 
pensar que pudieran las frágiles barcas 
hundirse en las aguas y no suspirar; 
ver que se adelanta, la garganta al aire, 
el hombre más bello, no desear amar... 

Perder la mirada, distraídamente, 
perderla y que nunca la vuelva a encontrar: 
y, figura erguida, entre cielo y playa, 
sentirme el olvido perenne del mar.

miércoles, 14 de agosto de 2013

No puedo vivir sin ti

Por Diana Zepeda


Qué absurda y enferma 
me parecía la frase: 
“ No puedo vivir sin ti” 
Hasta hoy comprendo,
Porque hasta hoy siento
Como algo falta cuando
Tu no estás, que algo muere
Dentro de mí, cuando te vas.
No puedo vivir sin ti
No porque muera en realidad,
Sino porque de alguna manera
Extraña y funesta, dejo de respirar.
Mis ojos no brillan más,
Me endurezco y me amargo
Solo porque no estás.
Sé que mucho valgo,
Sé que junto a ti hay muchos más,
Y qué me importan los demás,
Si eres tú a quien elegí para amar.

miércoles, 17 de julio de 2013

Una noche serena

Por Diana Zepeda


Quiero un vestido nuevo
y unos zapatos de tacón,
quiero darte un gran beso
y pintarte de color.

Medias blancas
y un peinado de salón,
robarte un suspiro
lograr tu atención.

Quiero al ver tu rostro,
 hallar amor en tu mirada,
 en tus oscuras pupilas
 mi sonrisa reflejada.

Quiero una fina caricia,
 una dulce promesa,
 tu palabra de honor
 sellada por un beso de amor.

Al caminar de tu brazo
en una noche serena,
quiero ver tus ojos
brillar como estrellas.

Quiero verte galante
 romántico y seductor,
 que permanezca siempre
 lo que de ti me enamoró.

 Quiero una copa
 de suave vino
 para brindar contigo
 esta noche serena.

 No escucharé condenas,
 murmullos o desprecios,
 no tendré disgustos
 ignoraré a mirones y necios.

Quiero andar a tu lado
 por un nuevo camino,
 iniciar juntos un viaje
 que dure toda la vida.

Quiero en cada tropiezo
una nueva oportunidad,
un lienzo en blanco donde pueda
contigo, mis suenos dibujar.

miércoles, 1 de mayo de 2013

Inventario galante


Antonio Machado

Tus ojos me recuerdan 
las noches de verano 
negras noches sin luna, 
orilla al mar salado, 
y el chispear de estrellas 
del cielo negro y bajo. 
Tus ojos me recuerdan 
las noches de verano. 
Y tu morena carne, 
los trigos requemados, 
y el suspirar de fuego 
de los maduros campos. 

Tu hermana es clara y débil 
como los juncos lánguidos, 
como los sauces tristes, 
como los linos glaucos. 
Tu hermana es un lucero 
en el azul lejano... 
Y es alba y aura fría 
sobre los pobres álamos 
que en las orillas tiemblan 
del río humilde y manso. 
Tu hermana es un lucero 
en el azul lejano. 

De tu morena gracia, 
de tu soñar gitano, 
de tu mirar de sombra 
quiero llenar mi vaso. 
Me embriagaré una noche 
de cielo negro y bajo, 
para cantar contigo, 
orilla al mar salado, 
una canción que deje 
cenizas en los labios... 
De tu mirar de sombra 
quiero llenar mi vaso. 

Para tu linda hermana 
arrancaré los ramos 
de florecillas nuevas 
a los almendros blancos, 
en un tranquilo y triste 
alborear de marzo. 
Los regaré con agua 
de los arroyos claros, 
los ataré con verdes 
junquillos del remanso... 
Para tu linda hermana 
yo haré un ramito blanco.

sábado, 9 de marzo de 2013

Te escribiré un poema

Por Diana Zepeda

He escrito tantas veces
miles de notas diferentes;
tareas, reportes, recados urgentes,
versos, cartas, palabras y sandeces.

He escrito tantas cosas
algunas de ellas sin pensar,
he creado líneas hermosas
que alegran y a la vez causan pesar.

Las palabras del adiós
hoy escribo para ti,
parece pronto, corre el tiempo veloz,
El ritmo de la vida es así.

Te escribiré un poema
para decirte adiós.
Redactaré en un poema
lo que no pudo expresar mi voz.

Y te escribiré en un poema
lo que no pude decir,
la despedida será el tema
la noche que te veré partir.

Vistiendo elegantes ropas
brindaremos con champaña,
levantaremos nuestras copas
en una fiesta de gala.

Quizá con la voz rota
y las manos temblorosas,
daré lectura a esta nota
ante tus miradas cristalinas y curiosas.

Te escribiré un poema
me dije al contemplarte,
te escribiré un poema
por amor al arte.

Voy a extrañarte tanto
y a recordarte siempre,
voy a secar mi llanto
para que me recuerdes sonriente.

Tanta alegría como pena
el triunfo me hace sentir
he aquí el poema,
llegó la hora de partir.

Disfrutemos el festín
celebremos nuestra gloria,
colegas, cimarrones, egresados  al fin,
todos parte de una historia.